Queridos amigos,
Espero que este correo les encuentre con buena salud y espíritu.
Cuando el gobierno de Japón anunció el año pasado que tomaría al menos cuarenta años eliminar los núcleos irradiados de tres reactores devastados en Fukushima, me centré en los peligros que podría ser presentados por cuarenta años de viento radiactivo y agua contaminada de Fukushima, a la vida marina y a la gente norteamericana.
Si uno preguntara a los vulcanólogos y sismólogos japoneses sobre la posibilidad de la erupción del Monte Fuji y un terremoto fuerte en Tokyo dentro de las próximas cuarenta años, dirían que es casi seguro que suceda. A pesar de que es probable que se produzcan daños en la vida humana, el medio ambiente y la economía, las personas lo ignoran porque no pueden pensar tan adelante. Solo son cuarenta años. Mientras tanto, la radiación es peligrosa por miles de años. ¿Cómo aprendemos a conectar estos marcos de tiempo a nuestra vida humana?
Me alegra presentarles “Incendios Forestales de California, y Radiación Nuclear,” escrito por Gregg Lien, un abogado de Lake Tahoe, California, que especializa en el uso de terreno y cuestiones medioambientales. Mientras avanzamos, me gustaría introducir las opiniones de observadores y expertos de muchas profesiones sobre la acumulación de radiación emitida de Fukushima por cuarenta años. Espero escuchar sus sugerencias sobre las acciones que podemos tomar ahora para reducir la carga para las generaciones futuras.
Saludos,
Akio
Incendios forestales de California y radiación nuclear
Una historia personal
Traducido por Colin McAndrews
Cuando compré un detector de radiación fácilmente disponible, justo después del desastre de Fukushima en 2011, nunca habría pensado cómo afectaría la forma en que veía el mundo.… Continue reading